domingo, 8 de mayo de 2011

Relato Kafkiano

Iba paseando a mi perro una mañana de domigo, cuando de repente apareció un juez. El juez al ver a mi perro dijo: "¡Qué perro tan feo, voy a tener que meterle en la cárcel por llevar un perro tan feo!". Entonces, mi perro se levantó sobre sus patas traseras y le dijo al juez que él no era un perro, que era un marciano y que por ser tan racista le iba a matar con su pistola de rayos X. Mi perro le disparó, y el juez se hizo polvo en el aire.

Al día siguiente, volví a sacar a mi perro de paseo y un señora se le quedó mirando y exclamó: "¡¿Qué es ese bicho?!" y yo dije: "un perro", y la señora extrañada siguió con su paseo.

Al anochecer cuando llegué a mi casa me dí cuenta de una cosa bastante rara, aquel animal/marciano no era mi perro, pero antes de poder reaccionar, el ser me hizo polvo con su pistola de rayos X ...

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